Con esta exposición reunimos cinco proyectos que Sala d’Art Jove y Lo Pati Centro de Arte de Tierras del Ebro han coproducido en el marco de la convocatoria Arte Joven. A lo largo de cinco años, en un contexto como el Delta del Ebro. Temporalidad, ritmos y contexto como punto de partida. ¿Cómo podemos re-activar los procesos de proyectos hechos en otro momento y contexto? ¿Hasta qué punto el medio afecta el proyecto o al revés; puede un proyecto artístico contaminar un sistema?

Una estrategia para gestionar situaciones de riesgo es apostar por los procesos, más que por los resultados. Editar de nuevo la información, consiste al decidir qué escoges y que descartas. Cruces de líneas temporales y relatos que se contaminan entre ellos. Posicionamientos diferentes ante un mismo paisaje de fondo, en un medio que abraza y aplasta a partes iguales. No descartar las tensiones ni las dudas como material que va tejiendo cuerdas, estirando entre la memoria y la posibilidad de futuro.

En un momento histórico donde el desastre inminente – en el ámbito social, ecológico, cultural, emocional- parece siempre al límite del precipicio, con una exposición y cinco proyectos artísticos, no podremos aportar soluciones al conflicto. Probablemente, ni siquiera datos fiables. La acción consiste más bien en un gesto, en un apunte al margen. Al compartir recetas y anécdotas, listas de música y objetos que caben a un bolsillo, para ir arriba y abajo. Seguir rodando.

Sin anclajes ni respuestas, compartiendo caídas. El mundo se va a la mierda pero queremos bailar y encontrarnos una vez más, discutirlo aunque no solucionemos nada.

O cómo dice Úrsula Q.Le Guin:

‘’Esto es. Y tú eres. No hay seguridad. No hay final. La palabra se tiene que escuchar en silencio. Hay de haber oscuridad para ver las estrellas. El baile siempre se baila sobre el lugar vacío, sobre el abismo terrible. ‘’